El me miro, yo me desnude

  Cuando terminamos de filmar sabíamos que no nos íbamos a ver mas. Aunque lo mas probable era que si volviéramos a cruzarnos, pero pensar así le daba un drama interesante. Engañábamos la realidad, creyendo ser azarosos, protagonistas de un hecho que no estaba mas que en nuestra cabeza.
El bar de al lado, que resulto ser una pizzeria, era el lugar perfecto para nuestro grupito de aficionados.  Un par de cinefilos hablando de películas, tomas, guiones, enfoques, actores,directores, del trabajo y el tiempo, el capitalismo y el puto sistema.
  Sus ojos penetraban los míos . Hablábamos sin saber lo que decíamos, opinábamos sin escuchar. No importaba nada mas que nuestras miradas y pensamientos.Era uno de esos momentos donde las mentes se atraen, piensan las mismas cosas, hay conexión casi virtual , pero nadie puede expresarlo físicamente mas que a través de los ojos. La mirada es un lenguaje universal, pero también crea ilusiones.

  Mientras algunos se despedían, organizaban encuentros o  simplemente observaban el panorama; mi grupo debatía sobre cuan cinefilo eras en relación a como prefieras morir. Yo quisiera morir ahogada, así mientras me hundo puedo ver todo lo que dejo en tierra. Me voy contemplando el cielo, para finalmente volver a el. Lo pensé, pero no omití una palabra, creo que el me escucho porque sonrió. Después comencé a creer que quizás fueran todas especulaciones mías y simplemente su mirada no hacia mas que coquetear o encantar al mundo, y no era nada especial para el. Muchas veces uno cree que están pasando cosas y no lo están  Todo volvió a  ser mas pasional cuando deje de mirarlo y el rozo mi pie clavándome sus ojos azules en mi boca, luego en mi vestido, hasta  agacharse a levantar una cuchada que por causalidad cayo al suelo y me quito los zapatos. Me sentí desnuda bajo mis medias de nylon.   Hacíamos el amor mientras hablábamos de cine.